Los símbolos del Espíritu Santo son los que representan para los cristianos la tercera persona de la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo).
Como tales, adquieren un carácter religioso. Entre ellos, destaca la paloma.
Paloma
La paloma es el símbolo más representativo del Espíritu Santo.
Según la Sagrada Escritura, cuando Juan el Bautista bautizó a Jesús, vio al Espíritu Santo descender sobre Cristo en forma de paloma.
Agua
El agua es el elemento principal utilizado en el sacramento del Bautismo, cuando la persona que se bautiza recibe el Espíritu Santo.
Para los católicos, el agua lava a las personas del pecado original y las convierte en hijas de Dios.
Aceite
Para la unción se utiliza aceite o aceite de oliva. También se utiliza en los bautizos y señala la presencia de Dios en la vida de los bautizados.
Fuego
Elfuego es otro elemento que simboliza el Espíritu Santo. Esto se debe a que, según la Biblia, el Espíritu Santo descendió sobre las cabezas de los apóstoles, esta vez en forma de lenguas de fuego.
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Viento
Antes de que las lenguas de fuego se posaran sobre las cabezas de los apóstoles, se levantó un fuerte viento. Este viento, que señala la llegada del Espíritu divino, es también un símbolo del Espíritu Santo.
Sello
El sello es una marca para identificar la presencia de Dios. Sirve de forma similar al aceite utilizado en la unción.
El sello no sólo marca la presencia divina, sino que manifiesta la autoridad de Dios en la persona marcada con él.
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