Símbolo de elegancia y ligereza, durante muchos años la libélula -conocida como «lavadeira» en Brasil- o «libelinha», como se la llama cariñosamente en Portugal, se consideró en su día un símbolo de mala suerte en Europa.
Su color brillante se asocia a menudo con las prácticas ocultas, el encanto y el lanzamiento de hechizos.
Significado negativo
En los cuentos populares suecos, el diablo utilizaba este insecto para agobiar las almas de las personas. Los noruegos la llamaban «ojo-agujero», mientras que para los holandeses la libélula era el «mordedor de caballos».
Los vietnamitas creían que el vuelo de las libélulas estaba asociado a la predicción de la lluvia y la inconstancia para los chinos.
Significado positivo
Sin embargo, en América, en contra de este simbolismo negativo, la libélula adquiere un carácter positivo de velocidad y actividad y es un símbolo de renovación tras periodos de dificultad
En Japón, la libélula simboliza el valor, la fuerza y la felicidad. Es un símbolo imperial de ese país, que también se llama «Isla de la Libélula»(Akitsu-shima) debido a su forma, que, al ser observada desde arriba por Jimmu-tennô, habría dicho que Japón tenía forma de libélula.
Tatuaje
El tatuaje de libélula es común entre las mujeres, que suelen optar por una imagen delicada en la muñeca, el tobillo o la nuca. Este diseño pretende reflejar características como la elegancia, el valor y la renovación.