La nube simboliza una división que separa dos mundos cósmicos. Como productora de lluvia, la nube tiene relación con la manifestación celestial, simbolizando el devenir de la metamorfosis. La relación con el agua de lluvia también asocia a la nube con todas las fuentes de fertilidad
Simbologías en la nube
La nube se reviste de diversos aspectos que revelan su naturaleza confusa, indefinida, indiferenciada y metamórfica. Debido a esta naturaleza de impermanencia, la nube también puede representar el desapego
División entre la tierra y el cielo, entre lo divino y lo humano, en la mitología griega y romana las nubes aparecen unidas al monte Olimpo y representan la morada de los dioses.
Ya según el esoterismo islámico, la nube es la manifestación de la nubosidad de la vida ordinaria. La nube envuelve los rayos de luz que atraviesan las tinieblas de la vida humana, pues no podríamos soportar tal iluminación de golpe. Por tanto, según el Islam, es bajo la sombra de una nube cuando se evoca el Corán y se alcanza la epifanía de Alá.
Según la antigua tradición china, la nube simboliza la transformación que debe sufrir el sabio, renunciando a su ser perecedero para alcanzar la eternidad, lo que representa una elevación espiritual.
Las nubes también transmiten mensajes según su aspecto. Las nubes oscuras y pesadas que preceden a las tormentas nos dan una señal de acontecimientos negativos. En cambio, las nubes ligeras, llenas y brillantes son signos de acontecimientos positivos.