Se considera, dentro del círculo de la alquimia, como un símbolo de la materia prima, análogo a las heces humanas.
Popularmente se dice que soñar con estiércol es un buen presagio, señal de que se recibirá dinero o se obtendrá un beneficio. Para un agricultor, por ejemplo, puede ser una indicación de una cosecha próspera.