En la cultura maorí, la mantarraya simboliza la sabiduría y la protección; sin embargo, este animal acuático también puede simbolizar el peligro, ya que tiene un ataque directo y mortal con su cola formada por una aguja venenosa. Conviene recordar un adagio popular maorí que advierte:«Sabio es el hombre que deja en paz a la raya«.
Cultura maorí
La cultura maorí representa las tradiciones, creencias y formas de vida de los nativos de Nueva Zelanda, es decir, los indígenas («tangata whenua» en lengua maorí significa «gente de la tierra») que habitaban el país antes de la llegada de los colonizadores.
Por ello, los animales eran considerados, muchas veces, sagrados y, con ello, formaban parte del simbolismo de la cultura maorí, ya sea en los rituales, o en el proceso de tatuaje del cuerpo, tan simbólico en esa cultura, una vez que simbolizaba la posición social, la nobleza, la sabiduría, la habilidad, el conocimiento, así como la experiencia personal. De este modo, cuanto más tatuados estuvieran el cuerpo y la cabeza de un guerrero, más noble sería.
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