La Cruz Celta, o Cruz Celta, es un símbolo que representa al pueblo celta, y su uso es más remoto que el de la cruz cristiana como símbolo del cristianismo. La Cruz Celta es una cruz con un círculo donde se unen las barras verticales y horizontales, y representa la espiritualidad centrada en la creación.
Según algunos estudiosos, su uso se remonta al equilibrio de la vida y la eternidad, con la unión de los cuatro elementos esenciales: agua, tierra, fuego y aire
En la actualidad, la Cruz Celta es también uno de los símbolos del presbiterianismo y de las iglesias reformadas bautistas y anglicanas, y representa el nacimiento, la muerte y la resurrección de Cristo. El círculo, que en el simbolismo pagano representaba el sol, ahora representa la circularidad de la vida, la renovación eterna
Al utilizar la Cruz Celta, las iglesias afirman su doctrina e identidad, revelando su herencia protestante. Desde esta perspectiva, la Cruz Celta representa la vida eterna en el reino de Dios.
Para los neopaganos, la Cruz Celta conserva su simbolismo ancestral, y se utiliza como amuleto de protección y también como talismán para ayudar a superar obstáculos. También es un símbolo de fertilidad y prosperidad.
Aprende más sobre la simbología de más Cruces.